Hoy hablaremos de las principales tendencias que inspiran la estética de las bodas de verano y cómo combinarlas con nuestras invitaciones.
Si hay una localización mágica para bodas de verano esa es junto al mar, por eso caracolas, conchas, estrellas de mar, corales o cualquier elemento que lo evoque será un acierto.
Otra de las ambientaciones favoritas para el verano por sus colores vivos y formas naturales que nos trasladan a un mundo exuberante y exótico.
Hace unos años las frutas se presentaron como las nuevas flores dentro de la estética nupcial, y lo que empezó como una tendencia ha venido para quedarse. En el caso de las bodas de verano, las frutas de origen mediterráneo como limones, naranjas, uvas, cerezas… son las que mejor combinan con esta temporada.
Hortensias, lirios, girasoles, lavanda… son algunas de las opciones que más nos gustan sobre todo en combinación con los arreglos florales y el ramo de la novia.
En primavera, y sobre todo en verano, podemos permitirnos menos sobriedad a la hora de elegir la gama cromática de nuestra boda. Los tonos cálidos y brillantes serán grandes aliados para aportar un toque extra de alegría y luminosidad al gran día.
Recuerda que si buscas invitaciones aquí puedes ver todos nuestros diseños, tenemos una colección para cada estilo de boda. Y como consejo final, nuestra recomendación habitual: aplicar la misma temática y gama cromática a todos los elementos de la boda para crear un discurso estético coherente.
Gracias por leernos!!
